Las profesiones posibles del señor Cajal: un científico humanista
La poliédrica figura de Santiago Ramón y Cajal, premio nobel de medicina en 1906, es una de las más importantes de la España moderna. No solo fue médico, sino fotógrafo y pintor. Incluso llegó a escribir una autobiografía y unos relatos de ciencia ficción. Su trabajo en el campo de la histología dio pie al nacimiento de la neurociencia, disciplina médica que ha tenido gran desarrollo a lo largo de los siglos XX y XXI. Sin embargo, como el mismo Cajal recoge en sus memorias, su vocación era otra muy distinta: el entusiasmo por el dibujo dominó su juventud, no el afán de convertirse en un distinguido científico. Precisamente, su gran capacidad como dibujante fue una de sus herramientas para lograr una eficaz representación de sus preparaciones histológicas. Todo esto, además, lo narrará en sus “Recuerdos de mi vida”, obra apreciada por escritores como Miguel de Unamuno. La cuestión de la vocación es el punto de partida que puede interesar a profesores, alumnos y, en general, a todo tipo de público, al mostrar un caso paradigmático de las posibilidades que brinda el hambre de conocimiento. Así, Cajal se erige en un ejemplo con el que se puede exponer cómo se llegan a interrelacionar disciplinas aparentemente distantes, cómo pueden interconectarse las ciencias y las humanidades. En definitiva, esta conferencia propone profundizar en la figura de Ramón y Cajal, un científico humanista.