El proyecto Djehuty redescubre la tumba del tesorero de Tutmosis III
El Proyecto Djehuty, liderado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y financiado por Unión Fenosa Gas, ha redescubierto en la colina de Dra Abu el-Naga, en Luxor (antigua Tebas), una tumba de la dinastía XVIII del Antiguo Egipto (hace unos 3.500 años). Se trata del enterramiento del sucesor de Djehuty en el cargo de Supervisor del Tesoro, llamado Djehuty-nefer, que vivió bajo el reinado de Tutmosis III, hace unos 3.500 años.
Los investigadores han sacado a la luz la fachada de adobe de la tumba, que imita a la de un palacio, conservada en perfecto estado y con las improntas del sello con el nombre del difunto legible en los adobes. Aunque la tumba ya había sido descubierta por Champollion y Rosellini en 1829, años después volvió a quedar enterrada y a perderse. Su localización dentro de la gran necrópolis en Luxor puede ayudar a entender las razones por las que los altos dignatarios elegían un emplazamiento concreto para ubicar su monumento funerario.
“En este caso parece que Djehuty-nefer eligió estar junto a su predecesor Djehuty, ya que su tumba está justo encima, y aparentemente no les unía ningún parentesco. Creemos que algunas tumbas se agrupaban por cargos administrativos”, explica el investigador del CSIC y coordinador del proyecto José Manuel Galán, que trabaja en el Instituto de Lenguas y Culturas del Mediterráneo y Oriente Próximo.
Los escribas buscaban inspiración visitando monumentos de épocas anteriores y copiando los textos que más les llamaban la atención. “La estatua de Djehuty-nefer que se encuentra hoy en el Museo de El Cairo tiene grabado el mismo himno al dios creador Amon que una de las paredes de su predecesor Djehuty”, destaca el investigador del CSIC.
En esta 14ª campaña se han hallado otras tumbas cuyos propietarios todavía están por identificar. Una de ellas, expoliada en época antigua, puede fecharse en la dinastía XIII (en torno al año 1700 a.C.) por la numerosa cerámica hallada a la entrada. En otra, a pesar de haber sido también expoliada, los investigadores han hallado en perfecto estado dos arcos de 1,70 metros de longitud cada uno, con la cuerda todavía anudada en los extremos, acompañados por una veintena de flechas completas, con la punta de sílex, y un jarrito de alabastro envuelto en una tela.
Por otro lado, el equipo ha seguido restaurando el pasillo central de la tumba de Djehuty, sacando a la luz más grafiti escritos en demótico (siglo II a. C.), que alcanzan ya casi el medio centenar y que aluden a la reutilización de las tumbas para depositar momias de ibis y halcones. En la vecina tumba de Hery, han proseguido con el estudio de los cientos de animales, fundamentalmente aves, que se inició hace dos campañas.
El ataúd antropomorfo y policromado, tipo “rishi”, de un personaje llamado Neb que vivió en torno al año 1600 a.C., hacia finales de la dinastía XVII, ha sido totalmente restaurado y ya está listo para su traslado y exposición en el Museo de Luxor.
Recordando a Djehuty
En busca de Djehuty: entre momias, tumbas y jeroglíficos es el nombre del documental que narra en 55 minutos los descubrimientos de las 13 últimas campañas arqueológicas del Proyecto Djehuty en Luxor. La cinta invita a los espectadores a adentrarse en la búsqueda de las huellas del supervisor del Tesoro y de los trabajos artesanos de la reina Hatshepsut, una de las pocas mujeres que ejerció de faraón en el antiguo Egipto y cuyo reinado se extendió durante 22 años en la dinastía XVIII, en torno al año 1470 a.C. Los nombres y rostros de ambos fueron borrados sistemáticamente hace 3.500 años para impedir su recuerdo.
El documental toma como punto de partida al personaje de Djehuty, y en su búsqueda van apareciendo otros personajes de distintas épocas, ocurren hallazgos inesperados, descubrimientos singulares que han sido filmados en directo y que consiguen que el espectador viva en primera persona la excavación de un yacimiento arqueológico del antiguo Egipto.
La cinta, dirigida y realizada por Javier Trueba y José Latova, y que ha contado con la dirección científica de José Manuel Galán, será emitido en TVE próximamente. Esta cadena, la Fundación Española para la Ciencia y Tecnología y Unión Fenosa Gas han aportado la financiación. El preestreno tendrá lugar hoy jueves, 21 de mayo, en la sede central del CSIC en Madrid.
“Fue un gran acierto y mucha suerte poder rodar en directo hallazgos tan importantes. Esto nos ha permitido hacer algo completamente distinto y se nota: la magia y la fuerza del directo es muy superior a la de unos actores disfrazados. Los egipcios ya lo han demostrado; 4.000 años después nos siguen fascinando”, Trueba.
Para Trueba, “lo más difícil, sin duda, ha sido descartar el material excedente que continuamente aparece en esta necrópolis”. Y agrega: “La diferencia fundamental con otros documentales es que, en cualquier otro ámbito de la divulgación de la ciencia, lo más difícil es buscar la manera de hacerlo atractivo para el gran público. Con Egipto, al público ya lo tienes gratamente predispuesto. Si además aportas un enfoque original no tengo dudas de que a la gente le gustará”.